10 innovaciones para su bicicleta

Vaya y eche un vistazo a este blog que siempre se renueva en su género: la eco-nadería.


Ya lo he comentado, hace tiempo. Esta vez, es una especie de panorama de tonterías verdes que estamos presenciando de una sola vez. El artículo se titula 10 innovaciones para el ciclismo. El argumento es hacer una lista de «innovaciones» y llamarlas «verdes» sólo porque tienen que ver con su bicicleta.


Un vistazo rápido revela que la innovación consiste sobre todo en dar nombres en inglés a viejos trucos o inventos que ya se han visto.


La primera «innovación» se llama «protector de culo»: se trata de una simple lámina de plástico alargada que se fija al sillín y evita que las salpicaduras de las ruedas manchen los pantalones. En resumen, es un guardabarros improvisado. Sin duda está hecho de plástico reciclable o algo así. En términos medioambientales, se llama «innovación». Yo lo llamo «tomar a la gente por tonta».


El segundo es un GPS con sistema de indicación: muy innovador, el GPS…


El tercero es un ascensor para bicicletas. Merece la pena ver el comentario del bloguero: «¡Totalmente loco pero igual de genial! Para mí, «loco» significa que hemos perdido la cabeza. Así que un remonte es una «completa locura». Eso tiene sentido. No se menciona su impacto en el carbono, su influencia en el clima de la selva amazónica ni el riesgo que este ascensor en bicicleta supone para la biodiversidad local. ¿Puedes creerlo?


No, todo esto se concentra en una sola frase ambiguamente entusiasta: «completamente jodido»… Uno se pregunta si este bloguero, repentinamente lúcido sobre su propia estupidez, no está describiendo su estado psicológico.


No voy a enumerarlas todas (son todas igual de banales, déjà vu o deshonestas), pero una última me llama la atención.


Si haces la compra como lo hacía la gente durante la guerra, es decir, con un cariole detrás de la bici, no pongas cara de circunstancias, ¡desgraciado! ¡Estás ante un CONCEPTO! Como a este concepto hay que ponerle nombre para venderlo, preferiblemente con un nombre dirigido a los retrasados mentales (un rasgo comunitario, en este caso), la empresa Intermarché lo llama Koursavélo. De hecho, la primera sílaba del concepto será suficiente.


Además, no es la única «innovación» para los pobres: la bicicleta de tres ruedas con techo, una especie de rickshaw indonesio reciclado, presagia el mundo que los ecologistas nos tienen reservado. La escasez, la pobreza y el darwinismo social son las ideas rectoras de la ecología cotidiana que nos preparan los candidatos a las elecciones municipales y sus cuadros ideológicos.


Por cada escaño que ganen los ecologistas en las elecciones municipales se suprimirán plazas de aparcamiento, kilómetros adicionales de carriles bus inútiles, calles de sentido único, carriles para peatones, multas, atascos provocados por los festivales de morcillas orgánicas, festivales de bicicletas recicladas y manifestaciones siempre festivas destinadas a obligar al populacho a viajar como los pobres: en bicicleta.